Democracia en el lápiz de un cubano
Hoy me llegó un email de un amigo cubano. Richard, como todos los miércoles se conecta a internet en alguna embajada, y me envío en dos hojas lo que pensaba sobre la Democracia para que la comparta en mi blog. El espera sus comentarios, puede haber diferencias claro, pero piensen que lo escribe una persona que nunca ha vivido en democracia, ex preso político. Saludos, Mica.
DEMOCRACIA
La democracia según mi humilde opinión, es el mejor sistema de Gobierno que ha existido hasta nuestros días, nadie puede asegurar que algún día se invente otro, pero eso está por ver.
Han existido varios intentos de acabar con la Democracia, sobre todo en el siglo XX, la historia ha conocido fascismo, nazismo, falangismo y comunismo; todos han tratado de diabolizar a la democracia con falacias e incluso con argumentos filosóficos, pero es tan axiomática la superioridad de ella, que aunque en algunas circunstancias entre en una crisis, puede salir de ella y fortalecerse aún mas.
La democracia para que funcione como dios manda, debe ser un Estado de derecho con una Constitución, que garantice la equidad de todo el pueblo en lo político, económico y social, donde exista la tripartición de poderes, se respeten los derechos humanos y se reconozca la libre empresa y la propiedad privada como sistema de producción.
No todas las personas de este mundo viven en democracia, aunque ese ha avanzado mucho en ese terreno, aún existen países que viven en autocracia y dictaduras; para las personas que viven en sistemas dictatoriales la vida es difícil y amarga, porque el totalitarismo termina inclusive con todos los valores éticos, humano, morales, etc.
En todo el hemisferio occidental existe la democracia como sistema político, excepto en Cuba donde existe un gobierno totalitario que tiene el récord de ser el gobierno dictatorial más viejo del mundo (más de 50 años de gobierno comunista), aún así en nuestro hemisferio no todo es color de rosa.
Cuando se violentan algunos de los fundamentos básicos de la democracia, esta comienza a fallar, o sea se enferma, y eso ocurre cuando algún líder se corrompe y por mantenerse en el poder comienza a violar las reglas éticas y necesarias de este sistema, comienzan por coartar las libertades y la economía comienza a ser un desastre.
Muchos dirigentes electos democráticamente comienzan a malversar los fondos del gobierno y se burlan miserablemente de sus pueblos. Se vio en Latinoamérica en la década de los años 60, cuando los Estados Unidos designaron 20 000 millones de dólares para la alianza para el progreso, y de ese dinero gran parte fue a parar a las arcas personales de los dirigentes corruptos de los pueblos.
Esa malversación de los fondos públicos por parte de esos dirigentes, sirven como caldo de cultivo a los populistas, que le prometen a las masas justicia si llegan al poder, y esos pueblos cansados de los engaños y la explotación, creen en los cantos de sirenas que prometen esos señores y llegan al poder con el apoyo popular.
Eso es la muerte de la democracia y la justicia, aunque el pueblo no lo vea en ese momento; cuando un gobierno populista llega al poder, el pueblo que no los conoce creen que llegó el mensajero de dios al poder, cuando en realidad es todo lo contrario.
Al principio se empieza a alfabetizar a los ciudadanos y a dar facilidades para el estudio y la salud pública, se garantiza el empleo general aunque dé pérdidas económicas, no importa, el problema es que se vea una diferencia, y se comienza a buscar un enemigo que cargue con las culpas de los problemas que están por venir casi siempre es contra EEUU.
En mi país Cuba en 1952 la democracia sufrió un duro golpe, el general Batista dio un golpe de estado el 10 de Marzo, e interrumpió el proceso democrático cubano que solo en 12 años de buen funcionamiento situó a Cuba a la cabeza de América Latina y en el puesto 22 a nivel internacional.
Pero los cubanos de la época, por el gran amor a la democracia combatieron con las armas en la mano al golpista, pensando que restaurarían la democracia; pues bien fue peor el remedio que la enfermedad.
El primero de Enero de 1959 triunfó la revolución que dirigió Fidel Castro y se instauró un gobierno comunista.
Permítame aclarar que en los gobiernos democráticos, los partidos comunistas logran grandes victorias, hacen todas las huelgas que les parecen, exigen la jornada de trabajo de 8 horas, la libertad sindical, la libertad de prensa, de asociación y cuantas libertades les parezcan, la democracia es tan buena que les permiten todas las libertades inclusive a los liberticidas.
Precisamente fue el golpista Fulgencio Batista quién legalizó el Partido Comunista de Cuba.
Pero cuando el comunismo se instauró como gobierno en Cuba, se acabaron todas esas libertades que los trabajadores ganaron en la democracia. El que hable en Cuba de huelga o en contra del gobierno o trate de fundar un sindicato o partido independiente o se reúna en un lugar que disgusta al gobierno, esa o esas personas van a parar a la cárcel, al paredón o al exilio.
Sé que muchos países latinoamericanos han sufrido dictaduras sangrientas, todas las dictaduras son nefastas para el país que la sufre; pero créanme, no es lo mismo una dictadura de derecha que una dictadura de izquierda.
En la dictadura de derecha se persiguen a los quieren cambios políticos, sobre todo si estos son violentos o sea si toman las armas para lograr ese cambio, pero a nadie le intervienen sus negocios y si no te conviene ese gobierno, te puedes marchar para donde te guste con tus recursos, la dictadura de derecha no interfiere en la educación, ni religión, ni amistades u otra cosa que no la haga peligrar.
Pero en una dictadura de izquierda todo es distinto, es un gobierno totalitario, lo organiza todo, todo es Estatal, se acaba la propiedad privada, todo absolutamente todo es intervenido por el gobierno, desde la tierra, las industrias, las escuelas, los hospitales, las bodegas, se ilegalizan todos los partidos excepto el comunista, comienzan los enfrentamientos con las religiones y como es lógico todo lo malo que pasa es culpa de los americanos; y si tratas de irte legalmente del país el gobierno te confisca tus bienes, casa, auto, dinero.
Es imposible en unas cuantas notas resumir la triste historia de 50 años de dictadura; que nadie crea que los cubanos no han tratado de despojarse de este gobierno mefistofélico, han sido miles los fusilados, miles los encarcelados, miles los ahogados en el estrecho de la Florida huyendo de la dictadura y millones los exiliados.
Desgraciadamente América Latina no aprende, quizás vean espejismos; vemos como la izquierda se va apoderando de nuestros países, y vemos como muchos presidentes electos democráticamente juegan a la democracia y se burlan de sus pueblos, esos señores no son ignorantes, son cómplices de la dictadura cubana y ellos también quisieran perpetuarse en el poder por eso vemos, como cambian constituciones, amañan elecciones y en fin envenenan la democracia.
Vemos con indignación como muchos presidentes latinoamericanos vienen a la Habana y le rinden pleitesía a los Castro, sin embargo no hacen nada ni siquiera por conocer a un opositor cubano para no disgustar al régimen. Le gustaba mucho a Lula que Fidel lo visitara en Brasil, la señora Cristina Fernández ni siquiera trató de ver a la doctora Hilda Molina que es un caso humanitario y de derechos humanos, un tema que ese supone que ella defienda, un Felipe Calderón que firma un acuerdo con Cuba, para repatriar a la isla a los cubanos que lleguen a México huyendo de la dictadura, sin embargo le pide a los EEUU que inserte a los miles de mexicanos que llegan ilegal a ese país que no huyen de ninguna dictadura; un Felipe Gonzáles abriéndole las puertas de la UE a Cuba de gratis, en fin todos esos presidentes son cómplices de la dictadura cubana. El señor Obama aunque con buenas intenciones, no conoce a los Castro y no le arriendo la ganancia.
No se dejen engañar con mentiras, como dice la Biblia, guardaos de los falsos profetas que vienen a ti vestidos de ovejas pero por dentro son lobos rapaces.
No hace falta inventar otro sistema político, eso es una utopía y cada vez que en algún país lo han intentado han salido mal parados, y las pérdidas en vidas y recursos son incontables, no olviden la historia de la Europa Oriental su experiencia es un axioma.
Vale decir esta sentencia: Los regímenes Marxistas-Leninistas no pueden cambiar su esencia, porque van contra las leyes de la naturaleza humana. El éxito de la democracia en su sentido universal es perfectible, y por eso se mantendrá como sistema político, económico y social hasta que exista el hombre como ser social y como centro fundamental de la humanidad.
En mi opinión lo que hay que hacer es perfeccionar la Democracia, luchar porque se cumpla la equidad necesaria para el pueblo, pero en Democracia y que citen como modelo a los países escandinavos, o a los europeos en general a EEUU y a Canadá , no a los países latinoamericanos que tienen en general una democracia deficiente.
Lograr que el género humano viva en el sistema democrático sería un gran logro, se debería inscribir como meta en los organismos internacionales, y que se tomen medidas necesarias para que ningún personaje aprovechándose de las bondades de la democracia, desgobiernen y envenenen a esos países. Lo mismo que se cercó internacionalmente al régimen de Sudáfrica en su momento, la comunidad internacional debería aislar a los dictadores.
Ricardo del Pino Barbán.
Ejecutivo del Comité Cubano Pro Derechos Humanos
DEMOCRACIA
La democracia según mi humilde opinión, es el mejor sistema de Gobierno que ha existido hasta nuestros días, nadie puede asegurar que algún día se invente otro, pero eso está por ver.
Han existido varios intentos de acabar con la Democracia, sobre todo en el siglo XX, la historia ha conocido fascismo, nazismo, falangismo y comunismo; todos han tratado de diabolizar a la democracia con falacias e incluso con argumentos filosóficos, pero es tan axiomática la superioridad de ella, que aunque en algunas circunstancias entre en una crisis, puede salir de ella y fortalecerse aún mas.
La democracia para que funcione como dios manda, debe ser un Estado de derecho con una Constitución, que garantice la equidad de todo el pueblo en lo político, económico y social, donde exista la tripartición de poderes, se respeten los derechos humanos y se reconozca la libre empresa y la propiedad privada como sistema de producción.
No todas las personas de este mundo viven en democracia, aunque ese ha avanzado mucho en ese terreno, aún existen países que viven en autocracia y dictaduras; para las personas que viven en sistemas dictatoriales la vida es difícil y amarga, porque el totalitarismo termina inclusive con todos los valores éticos, humano, morales, etc.
En todo el hemisferio occidental existe la democracia como sistema político, excepto en Cuba donde existe un gobierno totalitario que tiene el récord de ser el gobierno dictatorial más viejo del mundo (más de 50 años de gobierno comunista), aún así en nuestro hemisferio no todo es color de rosa.
Cuando se violentan algunos de los fundamentos básicos de la democracia, esta comienza a fallar, o sea se enferma, y eso ocurre cuando algún líder se corrompe y por mantenerse en el poder comienza a violar las reglas éticas y necesarias de este sistema, comienzan por coartar las libertades y la economía comienza a ser un desastre.
Muchos dirigentes electos democráticamente comienzan a malversar los fondos del gobierno y se burlan miserablemente de sus pueblos. Se vio en Latinoamérica en la década de los años 60, cuando los Estados Unidos designaron 20 000 millones de dólares para la alianza para el progreso, y de ese dinero gran parte fue a parar a las arcas personales de los dirigentes corruptos de los pueblos.
Esa malversación de los fondos públicos por parte de esos dirigentes, sirven como caldo de cultivo a los populistas, que le prometen a las masas justicia si llegan al poder, y esos pueblos cansados de los engaños y la explotación, creen en los cantos de sirenas que prometen esos señores y llegan al poder con el apoyo popular.
Eso es la muerte de la democracia y la justicia, aunque el pueblo no lo vea en ese momento; cuando un gobierno populista llega al poder, el pueblo que no los conoce creen que llegó el mensajero de dios al poder, cuando en realidad es todo lo contrario.
Al principio se empieza a alfabetizar a los ciudadanos y a dar facilidades para el estudio y la salud pública, se garantiza el empleo general aunque dé pérdidas económicas, no importa, el problema es que se vea una diferencia, y se comienza a buscar un enemigo que cargue con las culpas de los problemas que están por venir casi siempre es contra EEUU.
En mi país Cuba en 1952 la democracia sufrió un duro golpe, el general Batista dio un golpe de estado el 10 de Marzo, e interrumpió el proceso democrático cubano que solo en 12 años de buen funcionamiento situó a Cuba a la cabeza de América Latina y en el puesto 22 a nivel internacional.
Pero los cubanos de la época, por el gran amor a la democracia combatieron con las armas en la mano al golpista, pensando que restaurarían la democracia; pues bien fue peor el remedio que la enfermedad.
El primero de Enero de 1959 triunfó la revolución que dirigió Fidel Castro y se instauró un gobierno comunista.
Permítame aclarar que en los gobiernos democráticos, los partidos comunistas logran grandes victorias, hacen todas las huelgas que les parecen, exigen la jornada de trabajo de 8 horas, la libertad sindical, la libertad de prensa, de asociación y cuantas libertades les parezcan, la democracia es tan buena que les permiten todas las libertades inclusive a los liberticidas.
Precisamente fue el golpista Fulgencio Batista quién legalizó el Partido Comunista de Cuba.
Pero cuando el comunismo se instauró como gobierno en Cuba, se acabaron todas esas libertades que los trabajadores ganaron en la democracia. El que hable en Cuba de huelga o en contra del gobierno o trate de fundar un sindicato o partido independiente o se reúna en un lugar que disgusta al gobierno, esa o esas personas van a parar a la cárcel, al paredón o al exilio.
Sé que muchos países latinoamericanos han sufrido dictaduras sangrientas, todas las dictaduras son nefastas para el país que la sufre; pero créanme, no es lo mismo una dictadura de derecha que una dictadura de izquierda.
En la dictadura de derecha se persiguen a los quieren cambios políticos, sobre todo si estos son violentos o sea si toman las armas para lograr ese cambio, pero a nadie le intervienen sus negocios y si no te conviene ese gobierno, te puedes marchar para donde te guste con tus recursos, la dictadura de derecha no interfiere en la educación, ni religión, ni amistades u otra cosa que no la haga peligrar.
Pero en una dictadura de izquierda todo es distinto, es un gobierno totalitario, lo organiza todo, todo es Estatal, se acaba la propiedad privada, todo absolutamente todo es intervenido por el gobierno, desde la tierra, las industrias, las escuelas, los hospitales, las bodegas, se ilegalizan todos los partidos excepto el comunista, comienzan los enfrentamientos con las religiones y como es lógico todo lo malo que pasa es culpa de los americanos; y si tratas de irte legalmente del país el gobierno te confisca tus bienes, casa, auto, dinero.
Es imposible en unas cuantas notas resumir la triste historia de 50 años de dictadura; que nadie crea que los cubanos no han tratado de despojarse de este gobierno mefistofélico, han sido miles los fusilados, miles los encarcelados, miles los ahogados en el estrecho de la Florida huyendo de la dictadura y millones los exiliados.
Desgraciadamente América Latina no aprende, quizás vean espejismos; vemos como la izquierda se va apoderando de nuestros países, y vemos como muchos presidentes electos democráticamente juegan a la democracia y se burlan de sus pueblos, esos señores no son ignorantes, son cómplices de la dictadura cubana y ellos también quisieran perpetuarse en el poder por eso vemos, como cambian constituciones, amañan elecciones y en fin envenenan la democracia.
Vemos con indignación como muchos presidentes latinoamericanos vienen a la Habana y le rinden pleitesía a los Castro, sin embargo no hacen nada ni siquiera por conocer a un opositor cubano para no disgustar al régimen. Le gustaba mucho a Lula que Fidel lo visitara en Brasil, la señora Cristina Fernández ni siquiera trató de ver a la doctora Hilda Molina que es un caso humanitario y de derechos humanos, un tema que ese supone que ella defienda, un Felipe Calderón que firma un acuerdo con Cuba, para repatriar a la isla a los cubanos que lleguen a México huyendo de la dictadura, sin embargo le pide a los EEUU que inserte a los miles de mexicanos que llegan ilegal a ese país que no huyen de ninguna dictadura; un Felipe Gonzáles abriéndole las puertas de la UE a Cuba de gratis, en fin todos esos presidentes son cómplices de la dictadura cubana. El señor Obama aunque con buenas intenciones, no conoce a los Castro y no le arriendo la ganancia.
No se dejen engañar con mentiras, como dice la Biblia, guardaos de los falsos profetas que vienen a ti vestidos de ovejas pero por dentro son lobos rapaces.
No hace falta inventar otro sistema político, eso es una utopía y cada vez que en algún país lo han intentado han salido mal parados, y las pérdidas en vidas y recursos son incontables, no olviden la historia de la Europa Oriental su experiencia es un axioma.
Vale decir esta sentencia: Los regímenes Marxistas-Leninistas no pueden cambiar su esencia, porque van contra las leyes de la naturaleza humana. El éxito de la democracia en su sentido universal es perfectible, y por eso se mantendrá como sistema político, económico y social hasta que exista el hombre como ser social y como centro fundamental de la humanidad.
En mi opinión lo que hay que hacer es perfeccionar la Democracia, luchar porque se cumpla la equidad necesaria para el pueblo, pero en Democracia y que citen como modelo a los países escandinavos, o a los europeos en general a EEUU y a Canadá , no a los países latinoamericanos que tienen en general una democracia deficiente.
Lograr que el género humano viva en el sistema democrático sería un gran logro, se debería inscribir como meta en los organismos internacionales, y que se tomen medidas necesarias para que ningún personaje aprovechándose de las bondades de la democracia, desgobiernen y envenenen a esos países. Lo mismo que se cercó internacionalmente al régimen de Sudáfrica en su momento, la comunidad internacional debería aislar a los dictadores.
Ricardo del Pino Barbán.
Ejecutivo del Comité Cubano Pro Derechos Humanos
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