Nos empapamos en el INDEC

Eran las diez de la mañana hora de la convocatoria del sábado 15 de septiembre frente al INDEC, y de repente se oscureció el cielo tanto que pareció ser de noche. Los faroles de la nueva peatonal de Peru no llegaron a iluminar suficientemente la esquina como para ver más allá de unos pocos metros.

Un gobierno que no quiere ver y la gente que grita en la oscuridad, bajo la tormenta que no ahuyentó la conciencia ciudadana.

En la esquina de Diagonal Sur y Perú había un grupo de jóvenes que no paraba de cantar, con globos celestes y blancos en la mano. Los globos vestían carteles de precios y nombres de productos que han sufrido hasta el 200% de aumento en sus precios en el último año. El agua que caía a cántaros quiso aplacar el vuelo de los globos que fracasó en su propósito porque de todas maneras se fueron por el aire. Lavagna habló bajo la lluvia con un paraguas que no pudo frenar el agua, respondió las preguntas de los periodistas.

El organismo estatal que nos habla de los índices de precios, manoseado por el gobierno para que no muestre el aumento del índice de precio, no han tenido cabeza y no han podido esconder el aumento del índice de desempleo de funcionarios honestos echados injustamente por querer hacer lo correcto.