Tedéum del 25 de Mayo
La Presidente hace un festejo religioso en Salta, salteandose la tradiciónal ceremonia para conmemorar la fecha patria del Te Deum. Siempre hay una linda y discursiva excusa, como la que da el ex Presidente de "federalizar" la celebración ignorando que la Revoluciòn de Mayo se hizo en Buenos Aires y no en Salta. Además de querer hacer creer tener la maravillosa idea de hacer un encuentro interreligioso invitando a representantes de otras religiones cuando tradicionalmente siempre han sido invitados. Quizás porque el matrimonio Kirchner evitó siempre asistir a la Catedral Metropolitana para estas fechas es que no conocen las raices de estas costumbres.
Y me encantó cuando el Padre Guillermo Marcó (para los amigos Guille) dice "La realidad es que históricamente siempre el Tedéum fue una celebración convocada por el Gobierno nacional; ahora, si hay una decisión de hacerlo en diferentes provincias, bueno, entonces el arzobispo también podría alterar la tradición y, ya que no hay pedido oficial para hacerlo, celebrar uno en su propia Catedral". No por contradecir, sino por cuidar de la identidad nacional, si es que nuestra Presidente no lo hace. Es deber de los ciudadanos hacerlo, y en este caso específico de los cristianos argentinos.
Mientras tanto, el cardenal Bergoglio se va de un viaje extraordinario a Roma, y la prensa argentina ya comienza a confabular que el Papa lo llama para hablar de la indiferencia o mucho peor aùn de los continuos ataques absurdos del Gobierno hacia la Iglesia. De alguna manera así queda demostrada la continuidad de la política de Cristina con la de Néstor, la costumbre de pegarle a la Iglesia y de destruir las costumbres argentinas, además de generar más divisiones de clases y rencores en vez de buscar como líderes del país la unión nacional.
El Gobierno Nacional quieren, sin importar las consecuencias, sostener las mentiras sobre los índices de la inflación, la pobreza y acusan a obiuspos como Casaretto de querer defender la verdad. Ojalá cuidara al pueblo nuestros líderes políticos como cuidan su rebaño los pastores de la Iglesia.
El sábado 24 es la celebración del Corpus Christi en la Plaza de Mayo a las 15 hs y sería una buena oportunidad para que los argentinos recemos por la Patria, aprovechando que está allí Jesús vivo que sale a las calles de Buenos Aires bendiciendo al pueblo argentino y salir a manifestarnos de que es un pueblo primordialmente cristiano, y que nos unimos en oración a todas las confesiones para construir la identidad nacional. Reconocerse cristiano no es negar las existencias de otras religiones con las cuales convivimos en armonía, sino simplemente no negar la propia.
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ResponderEliminarAmar la patria
ResponderEliminares el amor primero
y es el postrer amor
después de Dios,
y si es crucificado
y verdadero
ya son un solo amor,
ya no son dos.
Amar la patria
hasta jugar el cuero
del puro patrio
Bien Común en pos
y afrontar marejada
y majadero
eso se inscribe
al crédito de Dios'
Leonardo Castellani
La verdad este artículo es mediocre y muy reaccionario, digno de un Caponnetto o un Biondini.
ResponderEliminarMitos y abstracciones como Dios, la patria, la identidad argentina y la anacrónica defensa de una institución opresiva como la iglesia. Lamento mucho que los jóvenes de hoy piensen como usted.
Dos errores: el estado es inclusivo, y sostener el culto católico en el estado es un anacronismo.Incluso los más conservadores en el mundo ya iniciaron la separación de la iglesia y el Estado... Chirac y Sarkozy, sin ir más lejos.
El estado es representativo, y ningina representación tiene que tener primacía sobre la otra. Más allá de que sea el culto sostenido por la mayoría (lo cual derrumba el mito de "la cristiana costumbre argentina", simplemente porque no lo hacemos todos), ello no es óbice para que el estado resuelva representar a las minorías religiosas en un simple acto como un Te Deum.
hacer un festejo en una Iglesia no impide la separacion de iglesia y estado... escontinuar con ciertas costumbres y tradiciones, un poco de patriotismo no viene mal a la argentina
ResponderEliminaresto no es un anacronismo es historia de nuestra argentina
y el error esta en ti cuando dices que el estado dejaria de ser inclusivo por sostener el culto catolico...mientras que haya libertad religiosa no existe problema en reconocer la religion de la mayoria.
creo q cuando dices q la iglesia es opresiva tienes una carga muy grande de prejuicios y de ignorancia...la iglesia somos todos los bautizados...
Y? No vas a publicar lo que te mandé ayer? No me hagar alimentar el mito de que todos los catolicos ortodoxos tienen tendencia a la censura... más allá de que sea una costumbre típica de la institución que los representa.
ResponderEliminarlo publique y te lo comente, acaso no lees? tipico de los barderos ignorantes
ResponderEliminarO no lo publicaste o no te llegó...
ResponderEliminarMas me apena que, solazando tu soberbia a alturas inimaginables, califiques a alguien de ignorante.
Y si de ignorancia hablamos, hablemos de tu pensamiento mágico, de la asociación supina de estado e iglesia como fuente de las peyorativas diferenciaciones ínsitas en tu discurso.
Los juicios universales son totalizadores, y tus hipóstasis de realidades inexistentes (Dios, la patria, la identidad nacional, el pueblo) no poseen bajo ningún punto de vista asidero ciéntifico. Éstos entes existen en tanto que pensados. Fuera de ese ámbito, son sólo flatus vocis.
Argentina forma parte de Latinoamérica, no sólo por ocupar una porción de su territorio sino porque comparte humanidad con la gente que también habita este continente... hay judíos, musulmanes, agnósticos, ateos, budistas, etc. etc., que no sólo merecen una garantía de "libertad de culto" explícitas por el ordenamiento jurídico de sus respectivos países, sino que también merecen actividades estatales (sean conmemorativas, festivas, electorales) que los incluya a todos por igual, sin menoscabar a nadie.
Vos en tu artículo aminorás el hecho de que el encuentro sea interreligioso, considerás que los católicos deben de tener la primacía en este tipo de actividades y pretendés reducir a los otros a la calidad, tal vez un poco inferior, de "invitados".
Además, si de raíces argentinas hemos de hablar, debemos reconocer también a nuestra herencia precolombina. Dicho escorzo de lo latinoamericano a sido sistemáticamente escamoteado por todas las redes de poder, inclusive el cultural y religioso.
Calculo que no dejarás de reconocer que los católicos que actualmente existen en nuestro continente, no son tales porque una entidad ultraterrena se manifestó universalmente como una revelación, sino porque a América se la anexó al devenir occidental imponiendo una cultura a costa de sangre, saqueos, vejaciones, torturas y apropiaciones. Y la institución que vos defendés, formo parte de ese genocidio humano y espiritual. Forjó un marco teórico de justificación para estas acciones. Hicieron hogueras, hierros calientes con forma de cruces y teorías de "Pueblos Infieles" y "Dominium Mundi". ¿Vos podés abogar por una institución que jamás tuvo el mínimo tino de resarcir de alguna forma tanta destrucción? No sólo noto defensa, sino adoración y ortodoxia transigente.
Creo que se puede cuestionar esto sin dejar de ser argentino. No forma parte de mis costumbres la "costumbre argentina" de asistir a un te deum, y ello no me hace un paria. Pero vos y tu discurso están estigmatizando a los no-católicos, que también son argentinos. Y ello es lamentable para alguien que se precia de político, como es lamentable tu agresión gratuita también.
Dale... publicá lo de ayer también.
ResponderEliminarNo censures a la poca gente que te lee.